Saturday, June 24, 2006

X La mujer que vuela (Parte II) (4)

Cont.
Parte II
El diario



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Las virtudes pueden ir acompañadas de defectos. “Pueden ser éstas mismas”. Son las 10:30 AM del día 28 de abril.

Hoy es cumpleaños de tu hermana Sandra, no la viste porque ella se quedó la noche anterior en su escuela, la Faculta de Economía.

Fabiola, la chica de la que está enamorado tu amigo Javier, vino a remover un poco el pasar de tu vida. No es tan drástico, pero presientes algo mayor.

Las primeras horas del día 21 de abril, en la brigada, al momento de cubrirse del frío, al meterse bajo las cobijas que tendieron y abrazarse mutuamente, hicieron un juego que los mantenía riendo, despiertos y en movimiento, era un ejercicio que contrarrestaba física y sicológicamente el frío y el pánico de la primer noche de la huelga. Dicho juego consistía en colocar sus manos sobre los demás y tomar algún brazo o una mano que se encontraran. “¿es tuyo?” y alguien decía “¡no, es mío!”. Era gracioso el error, pero lo más gracioso era el doble sentido que flotaba con la pregunta, nunca se especificaba qué es lo que se había agarrado. Decidieron nombrar esa brigada como “La brigada de los perversos”.

Fabiola y tu, permanecieron abrazados y tomados de la mano mucho tiempo, hasta que, temprano, por la mañana, se despidió y se fue a trabajar. Tu seguías molesto porque Luna se había ido hacía mucho rato con Gibrán y apareció hasta la mañana solo para despedirse.

Regresaste a tu casa esa tarde y volviste al día siguiente, jueves 22 de abril por la tarde y volver nuevamente a casa el día 23 por la noche. Durante esos días, del 21 al 23, fue muy difícil acordar un plan o una estructura de trabajo bien realizada, los proyectos para actividades y talleres surgieron, pero no se realizaron por falta de compromiso de las personas o por falta de gente que acudiera. Félix coordinaba difusión cultural, pero estaba tan metido en todas partes, que cuando se le solicitó el reporte de su comisión en asamblea no supo decir nada coherente por lo que intervino Eliuth y dio el informe completo ya que había estado trabajando conjuntamente con Mónica y contigo. Desde ese momento, Eliuth y tú, quedaron como coordinadores de la comisión de Difusión cultural.

El viernes 23, por la tarde te abordó el cansancio y tenías que irte, además esa tarde habría un concierto de Madredeus en el zócalo, pero estabas tan cansado que habías decidido no ir. Cuando ibas a despedirte de Fabiola, ella junto con Yumiko y Javier se habían incorporado ya, a un taller de expresión corporal. Te invitaron. Aceptaste. Durante y después del taller, la energía fluyó de tal modo, que no pudo sino ser realmente una expresión corporal la que los hiciera despedirse varias veces e ir acercando cada vez más el beso de la mejilla a la boca sucesivamente en cada despedida.

Acudiste nuevamente el sábado a la escuela tras haber ido a tu clase de photoshop en la escuela de computación. Llegaste como a las 5:00 y no viste ni a Eliuth ni a Fabiola.

Esa noche Javier entró en una crisis por la abstinencia a la marihuana y acudió a ti pidiendo apoyo y ayuda. Te asustaste, jamás lo habías visto tan mal. Lloró largamente entre angustia y desesperación. Dijo que estaba enfermo, que él no quería vivir así. No supiste decir nada. Enmudeciste. Lo abrazaste fuertemente, apretaste sus manos, acariciaste su cabeza… te sentiste mal por no poder hacer nada.

Más tarde, entre Fabiola y tu sucedía algo, ambos preparaban un terreno al que no te atrevías aún a entrar, sin embargo ella lo hizo. “Tengo muchas ganas de darte un beso” te dijo. Respondiste, dejando un “pero” en el aire, que tu también querías. Ambos entendieron que si lo hacían, causarían algún daño a Javier. Te sientes culpable, claro, culpable, porque de cualquier modo lo hicieron, y él lo notaba en sus rostros cuando se acercaba y ustedes trataban de disimular cuando soltaban el abrazo, se besaban cuando lo creían ausente, pero siempre llegaba nuevamente y él adivinaba todo.


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Curiosamente, para el día 22 de abril, el movimiento ya estaba trasminando al ambiente político. Por un lado, el Rector Barnés insistía en declarar con peticiones a los partidos políticos para que no se metieran en el conflicto, que era una cuestión de universitarios y que se resolvía entre universitarios. Por otro lado, lo partidos comenzaron a echarse la bolita unos a otros, la mayoría coincidía en que el PRD estaba metido con todo en el movimiento y que además invertía recursos en él, sin embargo, se defendían diciendo que cualquier persona era libre de participar en movimientos sociales por cuenta propia, y claro, era el caso de algunos militantes del partido, sin embargo no solo eran ellos, porque también gente del PRI decía que había gente del PAN dentro del movimiento y que estaban muy interesados en que se pagaran cuotas en la UNAM. Otros partidos pequeños, sin embargo, hablaban de que mientras unos se decían de otros, todos los partidos estaban interesados en el movimiento porque a partir de ahí tratarían de ganarse el voto de todos los universitarios al hacer frente a los problemas económicos de la educación. A pesar de que no fue ni una ni otra, todas esas cosas tenían algo de razón.

Por su parte, las autoridades universitarias comenzaban su juego sucio amedrentando a la comunidad del movimiento en distintos flancos, es decir, por la noche los porros acechaban las facultades y planteles, y en los medios ya sonaba la versión de que éstas, las autoridades, habrían de proceder penalmente contra algunos de los estudiantes identificados. En sus reuniones hablaban ya de cómo proceder con un plan de clases extramuros y se hacían llamados a la comunidad estudiantil a que se uniera contra los huelguistas.

Obvio, los medios ayudaban mucho a estos fines.



***

Aún cuando no se quiere pensar se piensa, solo que se hace de manera diferente o como conciencia nihilizadora del pensamiento que se quiere omitir. Son las 8:30 PM del día 4 de mayo.

Hace algunos días que no has querido pensar nada acerca de lo que estaba sucediendo, y principalmente con Fabiola. Sin embargo, parece que ayer terminó todo entre ustedes cuando ella te dijo “¿sabes?, eres un pendejo, la neta me decepcionaste bien cabrón…”. Al menos no te sientes mal, o lo crees.

Pero tienes un conflicto, la razón por la que Fabiola se puso así. Durante estos días, conociste a otra persona que se llama Brenda, en cuanto te llamó la atención te acercaste a decirle que es muy bonita, se presentaron y después de unos días ya se hablaban muy bien. Mientras, con Fabiola se seguía desarrollando una relación muy cercana a un noviazgo. Algo te estaba fastidiando mucho con ella, porque se pasaba el tiempo hablándote de Juan, su ex novio; a veces lloraba o hacía dramas cosa que te incomodaba bastante porque te veías a ti mismo lidiando con cosas que te parecen de secundaria. Y muy a pesar de que crees que no puedes vivir con esas cosas, tampoco tuviste el valor de decírselo abiertamente. En lugar de ello, le dijiste que había otra persona que te interesaba y que te hacía sentir pocamadre.

El domingo pasado (2 de mayo), realizaron un festival de día del niño. Fue un trabajo muy pesado. Desde los preparativos de la noche anterior por los que casi no durmieron y posteriormente con las actividades, los talleres y los juegos con que atendieron a los niños del pueblo de Santiago que acudieron. Desde el taller para hacer papalotes hasta las carreritas de costales, la gente se vio muy participativa y los niños contentos, los padres mostraron tanto su entusiasmo que hasta terminaron por enseñar ellos a ustedes, cómo hacer los papalotes porque los que ustedes hicieron simplemente no volaban. Fue un trabajo realmente hermoso que concluyó cerca de las 4:00 PM. Tu ya no quisiste hacer nada, ni siquiera recoger las cosas o limpiar. En lugar de ello, planearon ir a casa de uno de tus amigos a tomar cervezas para relajarse. Algunos se adelantaron a la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia (ENEO), porque habría una reunión ahí. Algunos otros junto contigo, los alcanzarían después.

Por la tarde, casi noche, encontraste a Brenda, te vio tan cansado que te dijo que te fueras a dormir y también te dijo que esa noche habría muy poca gente en la escuela, razón por la que le prometiste volver por la noche.

La reunión en la ENEO ya no se realizó, por lo que todos regresaron a la ENAP, pero el plan de las cervezas continuaba, solo que no podían ponerse de acuerdo en dónde se realizaría. Víctor y tú, querían quedarse en la escuela, tu razón obviamente era Brenda, pero eso no se lo dijiste a nadie. Los demás, o sea Héctor, Fabiola y Félix, querían ir a casa de Héctor. En lo único que se pudieron poner de acuerdo por lo pronto fue en comprar unas cervezas, así que Félix, Víctor y tú fueron a la tienda a comprarlas. Los demás los alcanzaron con el plan de ir a la casa. Fabiola te convenció de ir, aunque en realidad te sentiste comprometido a hacerlo ya que Víctor ya había aceptado la idea. Lo absurdo del asunto es que en ningún lugar, por más que buscabas, lograste encontrar un teléfono para llamar a la escuela y disculparte con Brenda. Rompiste la promesa.

Ya en la casa, tomaron cervezas, viña y tequila. Ni Fabiola ni tú tomaron mucho, en cambio se subieron a la azotea a platicar. Ahí fue cuando tú le hablaste de Brenda. Ella habló de cosas que le cagaban de tu actitud. No obstante empezó a besarte provocadoramente, claro, ella tomaba eso ya casi como un reto, porque días antes ya te había estado incitando a ello, pero tú te negabas por temor a no sabes qué, crees que al embarazo, que a las enfermedades, que a tu respuesta física, que a tu respuesta emocional… en el fondo debe ser una mezcla de todas. Pero te estaba besando y accediste, decidiste ceder ante la provocación, por lo que te acomodaste y comenzaste a deslizar tus manos por sus brazos, luego su vientre, lentamente avanzaste el ascenso hacia los senos, acariciabas suavemente. Ella te besaba el cuello, y alternaban. Descubriste su vientre y repetiste el recorrido anterior pero ahora directamente sobre su piel. Besaste su ombligo y el recorrido que tus manos emprendieron fue en descenso, fue de sus piernas a los muslos, las rodillas, los muslos nuevamente, el vértice, lentamente el vértice, suavemente el vértice. Ella te ayudó a aflojar su pantalón, a abrirlo. Tu boca comenzó a descender también con besos, el vientre, el césped de su vértice, la entrepierna, y finalmente la cima, la perla rosada de ese templo cálido que fue habitado por tu lengua y tu tacto. Hasta que provocaste una explosión en su cuerpo. Ella correspondió el gesto haciéndote explotar de la misma manera.

A la mañana siguiente Víctor y tú regresaron a la escuela mientras los demás se quedaron acostados. Llegando te encontraste con Brenda, tu corazón latió rápido y ella te hizo un gesto de desprecio “vas a ver eh!… ya no te quiero” dijo, “no, no es cierto, sí te quiero”… En pocas palabras te deshizo. En el fondo, sabes que no te hará caso y que si es linda contigo puede ser más por simpatía y otro poco por compasión.

Justo en este instante son las 9:30 y vas en dirección a la escuela, vas simplemente porque tienes ganas de verla aunque dudas que esté ahí.


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No sé a ciencia cierta si le gustan a usted los niños, lo que sí sé, es que usted adora a su linda sobrina. En esta época de mi vida, a raíz de diversas situaciones aprendí a convivir con ellos, esos adorables monstruos que destruyen las cosas para descubrir sus habilidades. Los nobles niños, a quienes ese fin de semana les festejamos el día del niño en diversas escuelas y facultades, mientras las autoridades universitarias seguían tratando de impedir el diálogo. Era muy curioso, ahora me lo parece, cómo a escasos 15 días de huelga, comenzaba a sonar algo que atemorizaba a todo el mundo y sobre todo a la comunidad universitaria, ya apoyando la huelga, ya apoyando los programas extramuros. Esta amenaza invisible que solo tenía una manera de nombrarse “Barnés le está apostando a una huelga larga”, la frase y su contenido, comenzaba a aparecer en nuestro lenguaje y cada día, paulatinamente se iba convirtiendo en un enemigo que nos golpeaba por dentro. Esto comenzaba a generar en nosotros una especie de desesperación. El movimiento empezó a dar sus primeras muestras de endurecimiento, de un inicial pliego petitorio de 5 puntos que comprendía la “Abrogación del Reglamento General de Pagos y anulación de todo tipo de cobros por inscripción, trámites, servicios, equipo y materiales”, la ”Derogación de las reformas aprobadas por el Consejo Universitario en junio de 1997”, un “Congreso democrático y resolutivo en el que toda la comunidad discuta y decida sobre los problemas que enfrenta nuestra universidad y cuyas decisiones tengan carácter de mandato para toda la comunidad universitaria y sean acatadas por las autoridades”, el “Desmantelamiento del aparato represivo y de espionaje montado por las autoridades y anulación de todo tipo de actas y sanciones en contra de maestros, estudiantes y trabajadores que participamos en el movimiento”, y “Recorrer el calendario escolar tantos días como los días efectivos de clase suspendidos por el actual conflicto, con la correspondiente anulación de las clases extramuros”; el día 4 de mayo en asamblea del CGH se decidió aumentar un punto a este pliego pidiendo el “Rompimiento total y definitivo de los vínculos de la UNAM con el Centro Nacional de Evaluaciones (Ceneval) y, en consecuencia, la anulación del examen único de ingreso al bachillerato de las universidades y escuelas públicas, así como del Examen Único de Egreso”. Ese mismo día, la asamblea decidió emplazar al rector para que diera respuesta a la petición de diálogo, la fecha, el 13 de mayo.


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La confusión puede convertirse en un reactor, a menos de que el temor o la inacción sean más fuertes. Son las 6:00 PM del día 9 de mayo.

Te diriges a la escuela, es un domingo gris, de esos en los que uno quiere ser planta, o estar metido bajo la cobija con un café a la mano. Aproximadamente en una hora con veinte minutos estarás llegando a la escuela. A pesar de tu falta de ánimo por llegar, tu preocupación por el funcionamiento de las comisiones te lleva y no se diga ya de las ganas que tienes de ver a Brenda. Ayer hablaron por teléfono y su tema de conversación fue “La confusión” si, tu confusión ante el movimiento, tu confusión ante el amor… pero ante todo, estás confundido porque no sabes si ella se ha dado cuenta ya de que te interesa como pareja. Ella, por su parte, te manifestó su apoyo, te dijo que te relajaras y que hicieras lo que creyeras mejor y que ahí, en tu decisión ella estaría contigo… hubieras querido, claro, que eso te lo dijera en otro tema de conversación.

Sientes que la quieres. Pero no quieres decirlo siquiera por temor a que ella no lo crea… pero, tienes el temor de que en realidad sea una mentira para ti mismo.
Por otro lado no quieres ir porque tienes miedo de enfrentar a Fabiola, ella te llamó ayer y dijo que te extrañaba y que quería estar contigo, y sabes, porque también te lo dijo, que estaría ahí. Ella, después de decirte que eras un pendejo fue a buscarte para decir que te quiere mucho y que quiere regresar contigo, pero llevas cuatro días sacándole la vuelta porque quieres hablar primero con Brenda antes de decidir algo.

Brenda ya conoce casi toda tu historia con Fabiola, y Luna la conoce completa con todo y la de Brenda a quien por cierto le has escrito ya algunos poemas que recibe con agradecimiento, pero quizá no has sido muy claro con ella.


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Eso usted lo sabe, la confusión puede a uno petrificarlo, no se diga de la mezcla entre confusión y temor. ¿Cuántas veces no ha estado en una situación similar? Sin saber cómo actuar porque no se decide a poner claros los sentimientos y prefiere ponerlos frente a un espejo de posibilidades y factibilidades… Como seres humanos tenemos el derecho a descubrirnos bajo nuestros propios errores, sin embargo, en ese descubrir uno puede hacer mucho daño, sin tomar en cuenta que al final del día, es uno el que resultó más jodido. A veces, la mayoría para ser más concreto, actuamos bajo el mismo mecanismo, no sabemos trabajar de otro modo, preferimos seguir insistiendo en una relación o en un trabajo o en un noséqué que nos proporciona displacer… es más cómodo porque ya sabemos cómo funciona… no nos atrevemos quizá a experimentar por temor a precisamente lo único que sabemos proporcionarnos. Se llama ironía.





(Cont.)

2 Comments:

At 3:04 AM, Anonymous Anonymous said...

¿por qué se acabó el blog?
¿por qué no continúo?

 
At 4:59 PM, Anonymous Anonymous said...

hola, dónde estas?
sólo me pose un rato para saludar...

 

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